¡Son vacaciones de Semana Santa!… esa fecha en la que los jóvenes pueden descansar de sus actividades cotidianas, las carreteras son toda una travesía de horas y horas y los padres llevan a sus chiquitines a que se tomen fotos con los diversos conejos de Pascua que se encuentran en centros comerciales y eventos infantiles.
Peeeeero no todas las experiencias con esos hombres (o mujeres) disfrazados de alegres conejillos son buenas. A continuación les traemos una serie de fotos que nos hacen preguntarnos: ¿qué diablos estaban pensando los padres de familia al dejar a sus hijos acercarse a estas criaturas del demonio?
Con mascaras horribles, trajes escalofriantes y sonrisas demoníacas, los pobres niños que pueden ver en estas imágenes seguramente quedaron traumados de por vida… chequen las fotos: